Todos nosotros como adultos, algún día hemos podido experimentar en nuestra propia piel el cansancio cuando suena el despertador tras una mala noche. Irritabilidad, mal humor, decaimiento, estrés, etc.
Pero, y en nuestros hij@s, ¿cómo afecta?
Muchas familias me comentan que sus hijos tienen muchas rabietas, o que son hiperactivos, pero muchas veces es sólo falta de un buen descanso (tanto diurno como nocturno), y cuando empiezan a dormir mejor se encuentran a un niño más tranquilo, más feliz, y lo único que pasaba es que estaba cansado.
Asique esto nos puede hacer pensar, ¿cómo interfiere en la vida diaria de nuestros hijos la falta de sueño? Es importante conocerlos para saber interpretar qué puede estar pasando:
Disminuye su atención hacia las cosas o personas
Se adapta peor a cualquier cambio
Se muestran más irritables
Tienen más berrinche
Pueden ser más hiperactivos
Les cuesta dormirse
Se levantan muy pronto (antes de las 6 am)
Necesitan más contacto con sus cuidadores, les cuesta ser independientes
La capacidad de aprendizaje se ve disminuida.
Se queda dormido en cualquier sitio
Es fundamental conocer e identificar qué le está pasando a nuestro hijo, porque muchas veces tendemos a poner etiquetas cuando quizá lo que está causando esa forma de ser viene por un problema al que se le puede poner solución.
Si tienes dudas sobre cómo mejorar el descanso de tu hij@, ¡escríbenos!
Comments